Un día en la vida nos encontramos,
humedecimos los pudores .
Fuiste reina blanca, yo, alfil negro…
Un día en la vida
decidimos ser viento
fecundar de sonidos a la hierba.
hubo flores que macularon nuestras vidas,
aromas de fuego en tus nevados.
También hubo tiempos
en que la tierra se hizo gris
abrieron fuego los tambores del silencio.














