Sendero
Ayer se tituló la más chica de la familia. Fueron veinte años de levantarse todos los días antes de que el sol saliera para solventar los gastos de la “niña” «dormiremos hasta que el sol nos despierte» —se dijo el matrimonio.
En la alborada la cama les propinó una patada por el trasero y en silencio se vistieron para allegarse al quehacer de todos los días.
