Tomado de. Fb
Ki no Tsurayuki (紀貫之), poeta mayor del fastuoso Periodo Heian (794-1185 d. C.), explica en el prólogo del Kokin Wakashū (古今和歌集) que la poesía es algo inherente a todo ser vivo, es decir, algo que surge por instinto y hasta por necesidad Así, cuando la emoción es tanta que desborda -a esto nos lleva las maravillas del mundo-, aparece «la canción». ¡Qué hermoso concepto! La poesía como una canción
Este concepto es, además, interesante porque se encuentra en clara sintonía con el resto de «canciones» que podemos hallar a nuestro al rededor, en la naturaleza: la «canción» del mar y las montañas, la «canción» de las arboledas y las flores, la «canción» de los animales grandes y pequeños, alados, acuáticos y terrestres…
Tal vez, por eso, de las casi 5 000 «palabras de estación» (kigo – 季語) existentes en el mundo del haiku, casi un tercio de ellas se encuentran vinculadas al mundo de los insectos (mushi – 虫)



