Sendero
Rachas de viento tibio y frío barrunta que el clima va a cambiar, seguramente es la causa de mis dolores de rodillas. ¡pero tu no tienes la edad de tu abuela! Encuentra otra razón que justifique o si ya no recuerdas estás como el abuelo. Me tiré en la hamaca evitando doblarlas, lucían enrojecidas. Sin tanto esfuerzo encontré la razón, era un adicto a hacer el amor arrodillado en el suelo. A veces por regusto, en otras para no despertar a los niños de la prima Margarita. Mi mujer no lo sabe, desde ayer se fue a un retiro con las beatas del pueblo.
