sendero
Hay pelotas de neblina rodando de cerro en cerro. En el imaginario meteorológico presumen que el sol se pondrá bravo después de la media mañana y atormentará a la flor de la limonaria. Los perros a vuelta y media se echarán debajo de los carros. y el silencio y la siesta dormitaran juntos. Despertaran cuando el bochorno cruce la pierna, fume su puro y trastabillando agarre camino. Los grillos saldrán de la maleza y brincarán para cualquier parte.
