Don Juan y Don Alberto, dos amigos de la tercera edad, se veían en el parque todos los días para alimentar a las palomas, observar las ardillas y discutir los problemas del mundo.
Un día Don Juan no llegó.
Alberto pensó qué quizá tuviese un resfrío. Pero después de una semana, se preocupó.
Siempre se juntaban solamente en el parque y Albert no sabía dónde vivía Juan,
por lo que no podía averiguar qué le había pasado.
Pasado un mes fue al parque y sorpresa, ahí estaba Juan.
Alberto estaba muy excitado y alegre de verlo y le dijo: por lo que más quieras Juan, dime qué te pasó.
Juan le contestó, «He estado en la cárcel»
-¿En la cárcel? -¿qué te pasó?
‘Bueno, dijo Juan, ¿Te acuerdas de Lupita, la linda mesera morena y nalgona de la cafetería donde vamos seguido?
-Claro, la recuerdo. ¿Qué pasa con ella?
‘Bueno, pues me demandó por acoso sexual y violación.
A mis 87 años, yo estaba tan orgulloso que, cuando fui al juzgado,
me declaré culpable …
¡Y el maldito Juez me sentenció a 30 días de cárcel por mentiroso!
Tomado del wasap