Sendero
En la tarde fría
se van los pájaros;
también
el tren se ha marchado.
El silencio
se hace espeso
cuando en alguna parte
un grillo canta.
La ventana vacía
extraña el pincel de tus manos…
también a tu mirada
que se perdía en la espesura.
El viento mece el rosal sin flores.

