sendero
La tarde pesa.
Por la ventana
las gotas ruedan.
El vaho exhalado
se anuba.
Dibujo con la uña
la curva de tu paso,
la doblez de tu cabello.
Musito la canción del viajero
que a su regreso
solo el silencio lo esperaba.
Musito tu nombre
mientras el viento silba;
y hace caer las flores del limonero.

